Las
preguntas de vez en cuando son respuestas también. Los sueños a veces son
preguntas. El amor de vez en cuando es para siempre. La muerte es vida algunas
veces. La vida no duele en ciertos momentos. La filosofía se equivoca muchas
veces. Dios no nos ha olvidado. El mundo va a cambiar en algún momento. A veces
me pregunto ¿Qué pasaría si todo lo que pienso fuera realidad?
A
veces me pregunto si tu cabeza ya está llena de mejores y menos dolorosos
recuerdos, me pregunto si tus corazones de papel ya son para alguien más, me
pregunto si te preguntas por mí, si me piensas, si me extrañas o si ya me has
olvidado. A veces me pregunto por ti y otras veces me pregunto por mí, ¿Dónde estoy?
¿A dónde voy? ¿Quién soy yo? Pero me hago el tonto, trato de ignorar las
respuestas a estas preguntas, pues ya las se todas. Ya sé que no piensas en mí,
ya sé que estas mejor sin mí, ya sé que me olvidaste, ya sé que a veces me
pregunto cosas que ya sé.
A
veces, como esta, me detengo a pensar con la vista en el cielo, un cigarro en
mi boca y un vaso de vodka en la mesa, si estás tú, en algún lugar del planeta
mirando el cielo estrellado, sintiendo la lluvia, temblando por el frío que produce
el viento igual que yo lo hago. A veces me pregunto si fue lo correcto
abandonarte, tomar un camino diferente, un camino solitario en donde camino
apenas sin tropezarme con mis enredados pasos. Siempre me pregunto por ti después
de preguntarme por el cielo, la tierra, los jabones, la comida, la vida, la
muerte, la soledad, la felicidad. A todas las grandes interrogaciones que aquejan
mi cabeza la respuesta siempre es tu nombre. A veces me pregunto si realmente
eres la respuesta a todo o si tan solo eres una opción.
A
veces me pregunto, pero eso era en el pasado. Ahora me pregunto, me pregunto si
encender este cigarrillo, en medio de una habitación saturada de gas fue la
opción correcta. Me pregunto porque de pronto el frío que sentía se calmó y porque
siento tanto calor. Me pregunto si la luz que viene de la cocina es la misma luz
que ven todos al final del túnel. Me pregunto si lo correcto es darle un trago
al vaso de vodka, me pregunto por ti mientras veo la luz que se acrecienta y se
acerca a mí. A veces me pregunto a donde van las cenizas de mi cigarro, a donde
irán las cenizas de mi cuerpo. A veces me pregunto y me dejo llevar. A veces el
fuego construye, a veces el fuego destruye. Hoy me pregunto si a veces me
pregunte lo suficiente. A veces me
pregunto…me pregunto…me pregunto…me consumo…me vuelvo humo…un recuerdo…el mal recuerdo…el muerto.
Así me siento, aunque sin la estampa final que recuerda mucho a "El club de la lucha".
ResponderEliminar